viernes, 1 de febrero de 2013

Un día por Roma.


Ese día nos levantamos en nuestra habitación del hotel, la habitación 53 para ser exactos.
Nos despertaron unos niños que estaban corriendo por el pasillo. Si hubiera sido un día normal, hubieramos estado todo el día de mal humor, pero aquel día no podíamos, era nuestro día por Roma y lo teniamos que pasar genial y teníamos que cumplir el "planing" que nos habíamos propuesto.
Nos vestimos en diez minutos rápidos y fuímos a desayunar.
Cuando terminamos, subimos a la habitación de nuevo y salímos para ver la preciosa ciudad, Roma.

Nuestro hotel estaba situado cerca del Coliseo, asique nuestra visita empezó por éste.
Tuvímos que esperar para entrar, una cola de una media hora, pero nos entretuvimos hablando con la gente de alrededor.
Cuando entramos, íbamos en un grupo con dos parejas que tampoco habían estado en Roma antes, las dos éran de Barcelona, y dímos una gran vuelta por el Coliseo, de una hora más o menos.


Del Coliseo, fuímos al Vaticano, al cuál no teníamos previsto ir, pero las dos parejas con las que íbamos anteriormente  insistieron y fuímos, aunque esta vez, por separado.

Cuando terminamos esa visita, fuímos a comer las dos ya que se nos había hecho un poco tarde y estabamos hambrientas. Estuvimos comiendo en una pizzeria, y nos tomamos una pizza entera entre las dos, ya que eran enormes.

Cuando terminamos de comer, fuímos a la Capilla Sixtina, y nos encantó. Nos contaron toda la historia y nos dejaron asombradas.

Y finalmente fuímos a la Fontana Di Trevi, ya que teníamos mucha curiosidad por conocerla, porque nos habían dicho que era muy bonita.
Nosotras nos la imaginabamos más pequeña de lo que era y al verla, nos impresionó mucho porque era preciosa rodeada de aquellos ángeles que algunos parecían tener movimiento.



Cuando nos dimos cuenta ya se había hecho de noche, y tuvimos que volver al hotel pronto, ya que no conocíamos muy bien la ciudad y preferíamos volvernos pronto.

Cenamos en el salón principal del hotel, junto a una de las ventanas, desde la que se podía apreciar toda la ciudad iluminada,  y era una maravilla.

Nos fuímos relativamente temprano a dormir ya que nuestro vuelo salía pronto al día siguiente por la mañana.

Después de aquel día por Roma, estabamos deseando volver a hacer otro viaje juntas, porque fue un día increíble para las dos.

1 comentario: